Muchos entusiastas de la impresión 3D se han enfrentado a este frustrante escenario: filamento PLA cuidadosamente almacenado que falla constantemente durante la impresión, dejándote preguntándote si el material ha "caducado". Si bien el PLA técnicamente no caduca, puede degradarse con el tiempo, especialmente cuando se expone a la humedad. Aquí te explicamos cómo identificar las señales de un filamento PLA comprometido y evitar desperdicios innecesarios.
El ácido poliláctico (PLA), uno de los materiales de impresión 3D más populares, ofrece facilidad de uso y beneficios ambientales. Sin embargo, su sensibilidad a la humedad hace que el almacenamiento adecuado sea crucial. Cuando el PLA absorbe humedad del aire, su rendimiento se deteriora, lo que lleva a fallas en la impresión y resultados deficientes.
Comienza tu evaluación examinando la apariencia del filamento. El PLA comprometido puede mostrar:
Estos cambios ocurren cuando el agua absorbida se vaporiza durante el calentamiento, alterando la estructura del filamento.
A continuación, evalúa las propiedades físicas del material. El filamento PLA de calidad debe demostrar cierta flexibilidad, doblándose ligeramente sin romperse. Si tu filamento se rompe fácilmente durante una flexión suave o se siente inusualmente quebradizo, es probable que haya absorbido demasiada humedad.
Si sospechas daño por humedad, intenta rejuvenecer el filamento mediante un secado controlado:
Un secado exitoso debería restaurar el rendimiento de la impresión. Si los problemas persisten después de un secado completo, puede ser necesaria la sustitución.
Al reconocer estas señales temprano y tomar las medidas adecuadas, puedes mantener tu filamento PLA en condiciones óptimas, asegurando una calidad de impresión consistente y minimizando el desperdicio de material.